viernes, 11 de mayo de 2012

Hay veces en las que te siento cerca de mí. A veces cuando paso por nuestras calles, releo conversaciones, veo antiguas fotos, recuerdo momentos y me pongo la ropa que te gustaba, noto que estás conmigo. Llevaba meses, muchos meses sin hablar de tí; ni siquiera pensaba en tí; pero como una oleada de calor me dispuse sin querer a recordar.                                                                      A recordarme. A recordarte. A recordarnos.                                Ha pasado tiempo. Ha llovido mucho desde aquello. Puede que hayas estado con otra; y yo con otros, pero supongo que hay cosas que no se olvidan nunca. Cuando recuerdo, cuando veo, cuando escucho; a veces siento un cosquilleo. No lo llamaré mariposas porque es completamente imposible que lo sean. Llamémoslo nostalgia. Y será la nostalgia de la fantasía; pues no hay nostalgia de tí.
Aún así, sigo siendo capaz de recordarlo todo y casi de sentir como la primera vez.
Hoy hace tiempo nos vimos. ¿Nos veremos? No tengo intención ni apetito de ello.
Hace mucho que no sabemos el uno del otro, y creo que más de una vez a ambos nos han asaltado las dudas acerca de la situación del otro. ¿Que qué hubo? Eso es demasiado relativo. Hubo de todo. Y ahora hay recuerdos. Quizás para tí olvidados, pero para mí nostálgicos al paso del tiempo, como una historia escrita sobre arena.


No hay comentarios:

Publicar un comentario